Si no eres fumador, es normal que el olor de los cigarrillos te sea muy molesto, pero te contaremos a continuación cómo eliminar el mal olor a tabaco. Esto suele ser más incómodo especialmente en espacios cerrados, ya que suele concentrarse y ser mucho más fuerte que en aquellos al aire libre.
Es cierto que los fumadores poco a poco van perdiendo la capacidad de oler y reconocer el olor a tabaco. No obstante, a muchas personas que fuman en su día a día, también les puede desagradar el olor de los cigarrillos. Así que no se trata de algo incómodo solo para los fumadores pasivos. Es por ello que conoceremos a continuación diferentes consejos, métodos y productos para combatir este apestoso olor.
Recomendaciones y productos para eliminar el olor a tabaco
Este desagradable olor puede impregnarse no solo en el ambiente. También se impregna en los textiles y elementos presentes en el espacio en el que se encuentren los fumadores. Esto ocurre especialmente en aquellos lugares en los que la acción de fumar se repite reiteradamente. Te contamos algunas recomendaciones para eliminar el olor a tabaco en diferentes espacios.
1. Lavar frecuentemente los textiles
Ciertos elementos textiles son más propensos a que el olor de los cigarros se quede impregnado en ellos. Entre ellos nos podemos encontrar las cortinas, las alfombras, los edredones y sábanas y la ropa. Es por ello que te aconsejamos lavar frecuentemente este tipo de objetos. Así evitarás que el olor adquirido por ellos, haga que el ambiente huela mucho más a tabaco.
Para el lavado de cortinas, sábanas, edredones y ropa, te aconsejamos utilizar un programa de lavado con agua caliente. Eso sí, siempre ten en cuenta las indicaciones de lavado que aparezcan en las etiquetas de cada prenda. Además, el vinagre blanco es un buen neutralizador de olores. Es por ello que le puedes echar un vaso de este producto a tu lavadora antes de iniciar el programa de lavado.
2. Limpiar los muebles tapizados
Al igual que los textiles, los muebles tapizados también están muy expuestos a la impregnación del mal olor del humo del cigarrillo. Cuando hablamos de muebles tapizados, nos referimos a sofás, cabeceros, butacas, sillas y sillones, etc. Sin embargo, estos son mucho más complicados de limpiar. Existen algunos productos específicos para ello, pero puedes utilizar un remedio casero muy sencillo de preparar y aplicar.
Para ello necesitarás el jugo de un limón y la misma cantidad de agua. También medio vaso de suavizante y de agua, y bicarbonato de sodio para la ropa.
En una botella con pulverizador o spray, mezclar el limón con el agua y, en otra botella igual, el suavizante y el medio vaso de agua. Ahora limpia el sofá con algún trapo o cepillo para eliminar cualquier tipo de polvo o suciedad. Luego espolvorea y cepilla el bicarbonato sobre el sofá.
Una vez hecho esto, deberás pulverizar el limón con el agua hasta que el sofá quede humedecido. Dejarlo reposar durante 1 hora. Pasado el tiempo, deberás cepillarlo nuevamente y pulverizar con el suavizante y el agua para dejar un agradable aroma en el sofá.
3. Utilizar productos elimina olores
Existen productos que eliminan diferentes olores. Los neutraliza químicamente ocasionados en ambientes cerrados. Muchos de estos, no solo los enmascara, sino que los elimina por completo, dejando el ambiente en muchos casos ligeramente perfumado.
Te aconsejamos estos dos elimina olores que, además, son aptos para usar en espacios con mascotas:
- El pulverizador elimina olores Neutralizador ZOTAL Hogar (250 ml) es la mejor opción para tener en espacios en los que suela haber olor a tabaco.
- El pulverizador elimina olores Neutralizador ZOTAL Hogar (75 ml) es perfecto para llevar en el bolso por su práctico formato.
4. Airear a diario el espacio
En los lugares en donde se suele fumar, es recomendable abrir las ventanas durante al menos 1 hora todos los días. Si se pudiese hacer varias veces al día el espacio, ¡mucho mejor! Esto hará que el aire del interior del espacio sea sustituido por aire fresco y limpio que proviene del exterior. Esta pequeña acción, beneficiará la desaparición del olor del tabaco.
5. No dejar las colillas acumuladas
Si después de fumar, dejamos las colillas de los cigarros acumuladas en el cenicero, esto puede emanar algo de olor, dejándolo en el ambiente. Es aconsejable vaciar los ceniceros una vez se acabe de fumar. Otra opción es hacerlo cada poco tiempo para evitar este problema.
No obstante, si no podemos hacerlo frecuentemente, un consejo que puedes tener en cuenta es echar arena en los ceniceros. Esto favorecerá a que el humo de las colillas no se disperse por el habitáculo.
6. Utilizar un ambientador anti tabaco
Después de aplicar todos los métodos anteriores, podemos dar un toque de buen olor con un ambientador convencional para dejar un aroma agradable en el espacio. Sin embargo, te aconsejamos utilizar un ambientador con acción anti tabaco. Este no solo lo deja perfumado, sino que también camufla cualquier olor a tabaco que pueda existir en el ambiente.
Estos suelen actuar de inmediato, suprimiendo el hedor a los pocos segundos de ser pulverizado. Además, algunos pueden ser utilizados en todo tipo de estancias, e incluso para el sector de la hostelería y en el interior de los coches.