La obligatoriedad de las mascarillas y su uso diario ha hecho que muchas personas opten por las mascarillas reutilizables en lugar de las desechables. Si se usan de forma adecuada y son desinfectadas correctamente cuando toca, son productos de higiene tan seguros como el resto de mascarillas.
Eso sí, hay que tener siempre en cuenta el tipo de mascarilla del que se trata, porque de ello dependerá si puede desinfectarse y de qué manera hacerlo. Antes de desinfectar una mascarilla, debemos asegurarnos de que se trata de una mascarilla reutilizable. Generalmente, suele indicarse en la caja y/o las instrucciones del producto.
En ningún caso deberías intentar desinfectar y reutilizar mascarillas desechables. De este tipo, las más comunes son las quirúrgicas, higiénicas no reutilizables y FFP2. Estas mascarillas deben ser desechadas tras su uso. Ten en cuenta que el tiempo máximo de uso para la mayoría de las mascarillas higiénicas y quirúrgicas es de 4 horas, mientras que el de las FFP2 se sitúa, en general, entre 4 y 8 horas.
Desinfección de mascarillas en la lavadora
La primera forma de lavar y desinfectar nuestras mascarillas higiénicas es en la lavadora. Si ésta lo permite, podremos hacerlo utilizando un detergente normal y un ciclo de lavado a una temperatura de 60ºC o superior.
Antes de meterla en la lavadora, para evitar dañarla, consulta las instrucciones del fabricante para asegurarte de que no haya ninguna indicación que lo contradiga. Recuerda también, hasta introducir la mascarilla en la lavadora, manipularla por las gomas sin tocar en ningún momento la parte interior o exterior.
Una vez haya terminado el programa de lavado, ya puedes sacarla y ponerla a secar tendida.
Cómo lavar y desinfectar mascarillas con lejía
Un segundo método, si no queremos hacer uso de la lavadora cada vez que vayamos a desinfectar las mascarillas, es lavándolas con lejía, agua y jabón.
La recomendación del Ministerio de Sanidad es sumergirla, durante media hora, en una dilución de lejía y agua tibia en una proporción 1:50. Una vez transcurrido este tiempo, habrá que lavarlas con abundante agua y jabón para asegurarnos de eliminar completamente cualquier resto de lejía.
Finalmente, procedemos a aclarar totalmente el jabón y ya podemos poner la mascarilla a secar para ser usada de nuevo.
Estos dos sencillos métodos te asegurarán la desinfección de tus mascarillas higiénicas reutilizables para que las puedas volver a utilizar con seguridad hasta que cumplan su máximo de ciclos de lavado.
Adicionalmente, puedes complementar estos métodos con otros productos de higiene, como los desinfectantes de mascarillas, que aunque no los sustituyen, refuerzan la seguridad de las mascarillas durante el tiempo que pasa entre un lavado y el siguiente.